sábado, 15 de noviembre de 2008

David Hasselhoff, ese visionario



La sociedad es injusta con sus genios, en vida. Hay una lista de ellos, Van Gogh, Kafka, el/los dibujantes de Mázinger Z (¿cómo no recordamos su/s nombre/s?), Robert Walser, y ahora David Hasselhoff. En una de las series de referencia de la historia de la televisión, "Los vigilantes de la playa", introdujo una serie de innovaciones que pasaron desapercibidas en su momento pero que han revolucionado el lenguaje audiovisual. Os dejo aquí una de ellas: ¿recordáis esos momentos videoclip en los capítulos? La acción se paraba y se escuchaba una canción, ilustrada con imágenes al ralentí de los vigilantes metiéndose mano en la playa, o corriendo con aquellos maravillosos salvavidas rojos. Con una clarísima influencia brechtiana, este elemento distanciador era un toque de atención inteligentísimo de Hasselhoff, que nos recordaba así que estábamos en una ficción, y lo hacía introduciendo una ficción (video clip) dentro de la misma ficción. La genialidad de David no ha pasado desapercibida: el otro día vi que hacían lo mismo durante una refriega del Duque y Cata en "Sin tetas".

No es el único hallazgo. Revisemos la serie, digo más, no olvidemos la herencia de nuestros clásicos. Ellos nos hacen mejores.

1 comentario:

SyS dijo...

Todos bebemos de las grandes series maestras como Falcon Crest, Melrose Place o Menudo es mi Padre, ésta última, obra maestra que con El Fari como actor principal marcó un antes y un después en la ficción española. El Duque, sin duda, también es hijo de ese taxista de barrio que tan bien encarnaba el ruiseñor de Carabanchel.